La División Homicidios y Delitos Complejos procedió ayer a la detención de dos enfermeros más, en el marco de la causa que investiga el robo de vacunas contra el coronavirus, desde el Ministerio de Salud. Se trata de Fermín Ernesto Medina (53) residente en el barrio El Vinalar y de Omar Edgardo Véliz (42), quien se domicilia en el barrio Huaico Hondo. Ambos habrían actuado en complicidad con el matrimonio compuesto por Dante Díaz y Angélica Coronel, detenidos el pasado sábado. Todos están acusados de "hurto agravado y adulteración de sustancias medicinales, en perjuicio del Estado provincial. 

Además de los domicilios de todos los detenidos, la policía allanó el Consultorio Enfermería del Sur. Sin embargo, el recuento del stock de vacunas demuestra que todavía faltan 68 dosis de la vacuna Covishield. Se estima que ya podrían haber sido aplicadas a particulares, que habrían abonado a cambio importantes sumas de dinero. La policía investiga además el hallazgo de sellos de dos médicos y trabaja para determinar si también fueron robados.

Dosis recuperadas

La jefa de Inmunización del Ministerio de Salud de la provincia, Florencia Coronel, se refirió al robo de vacunas contra el coronavirus desde el  Ministerio de Salud por el cual ya hay cuatro personas detenidas.

En ese sentido, indicó que fueron aproximadamente 300 las dosis robadas y que se recuperó la mayoría, principalmente las Sputnik. En tanto, señaló que faltan las dosis de la vacuna Covishield y que sospechan que fueron colocadas, aunque ello es materia de investigación por parte de la Justicia, aclaró.

Además, lamentó en diálogo con Radio Panorama que este robo pueda empañar el trabajo del Ministerio de Salud en la lucha contra el Covid-19. “Es tanto el esfuerzo para la logística de estas vacunas que una persona con un hecho tan nefasto, que solo ha pensado en él (por el enfermero Dante Díaz, el primer detenido y a quien le encontraron las vacunas en su domicilio del Bº San Germés) y no en todo el daño que hizo al trabajo de sus compañeros, al sistema y a la credibilidad de la vacuna”, manifestó.

“Hoy nos tenemos que detener a hacer estas cuestiones judiciales y no continuar con nuestro trabajo de la vacunación. Nuestro trabajo se ve empañado por este hecho nefasto”, expresó.

Sobre la cantidad de vacunas robadas, indicó que se está terminando “de hacer un arqueo, pero se robaron aproximadamente unas 300 dosis. Se recuperó la mayoría de las vacunas, sobre todo las de Sputnik V. Las que no se recuperaron son las de Covishield, los frascos de esta vacuna Covishield no estaban en la heladera donde se recuperaron las otras”.

Consultada sobre si se podría haber cortado la cadena de frío en este robo, Coronel afirmó que “no, vamos a terminar de ver, estaban en una heladera, las que deben resguardarse de 2 a 8 grados estaban en la parte baja y las otras en el freezer. Cuando se detecta el hecho se lleva la crio-conservadora para traer las vacunas Sputnik a temperatura adecuada que es a -20º, para llevarla de nuevo al Ministerio de Salud y se las guarda por precaución en el ultra freezer, para conservar la cadena de frío; y las otras que van de 2 a 8 grados, en la cámara”. “No sabemos si las vacunas que faltan fueron colocadas y vendidas, eso lo maneja la Justicia, pero es lo más probable”, dijo por otra parte y agregó que “que quienes recibieron estas vacunas (de manera ilegal), recibieron la primera dosis y que les falta la segunda dosis”.

Por otro lado, señaló que hasta el momento se colocaron 110.000 dosis y que se estima que esta semana se continuará con la vacunación en más de 40 localidades programadas.

“Se ha trabajado con transparencia y orden para inmunizar a los grupos de riesgo priorizados. Más del 60% de las dosis aplicadas fueron para personas mayores de 60 años con factores de riesgo, mientras que más de un 90% del personal de salud ya recibió las dos dosis. (Fuente El Liberal)