Cada 1 de agosto se celebra el Día de la Pachamama, una de las tradiciones ancestrales más profundas de los pueblos andinos. En Argentina, la festividad tiene fuerte arraigo especialmente en las provincias del noroeste, donde se honra a la Madre Tierra con rituales de agradecimiento, renovación espiritual y limpieza energética.
Según la creencia andina, en esta fecha la Pachamama "renace" tras un período de descanso que comenzó con el solsticio de invierno. Este despertar activa un fuerte movimiento de energías, por lo que se considera un momento propicio para sahumar los hogares, agradecer y prepararse para un nuevo ciclo.
El sahumado: qué es y qué se necesita
El sahumado es uno de los rituales más practicados durante esta jornada. Consiste en la quema de hierbas y resinas con distintas propiedades, ya sea de forma individual o combinadas. Se pueden utilizar sobre carbones encendidos o en ramilletes. El objetivo es limpiar las energías negativas, atraer protección y armonía, y abrir paso a un nuevo tiempo de abundancia.
Al finalizar el sahumado, es fundamental realizar un gesto de agradecimiento y recordar la intención manifestada al inicio del ritual. Esta acción cierra el ciclo de purificación y permite la apertura a nuevas energías.
Qué significa cada elemento utilizado en el sahumado
Incienso: limpia, purifica y protege.
Mirra: aporta sanación, claridad y limpieza energética.
Palo santo: sella las energías, calma y serena el espíritu.
Ruda: absorbe energías negativas y limpia ambientes; es un potente protector.
Romero: transmutador de energías densas; facilita la relajación y armonía entre personas.
Lavanda: genera paz y armonía en el hogar, purificando mente y emociones.
Eucalipto: limpia y refresca los ambientes.
Canela: favorece la abundancia y la prosperidad.
Sándalo: estimula la concreción de proyectos y atrae el dinero.
Laurel: abre caminos y promueve nuevas oportunidades.
Cómo preparar el té de ruda
Otra práctica extendida durante el Día de la Pachamama es la ingestión del té de ruda, considerado un ritual de purificación corporal. Se realiza en ayunas y, según la tradición, debe beberse en uno, tres o siete tragos.
Ingredientes:
1 cucharadita de ruda seca apta para consumo humano (sin agregados químicos)
1 taza de agua
Preparación:
Hervir el agua hasta el punto de ebullición.
Agregar la ruda y dejar hervir por 3 minutos.
Retirar del fuego y dejar reposar por 5 minutos más.
Colar la infusión antes de tomar.
Se recomienda consumirla sin endulzar y, en todos los casos, consultar previamente con un médico, ya que la ruda está contraindicada para mujeres embarazadas, niños y personas con ciertas condiciones de salud.