El incendio que afecta al Cerro El Manchao ya lleva cuatro días y ya consumieron más de 900 hectáreas de monte nativo, pastizales y hábitats esenciales. Desde el lunes, brigadistas, bomberos voluntarios, personal policial y autoridades locales se encuentran en la zona. En tanto este jueves, por primera vez, las condiciones meteorológicas permitieron operar con medios aéreos. Helicópteros y aviones hidrantes comenzaron a intervenir en la zona, sumando esfuerzos al trabajo de contención por tierra.
Respecto a cómo comenzó el siniestro, las primeras hipótesis indican que todo se habría originado a raíz de una quema ilegal de pastizales o residuos forestales, y se expandió rápidamente por las condiciones climáticas y del terreno.
A causa de esto, los daños ambientales son graves. Se reporta la pérdida de especies de alto valor ecológico, alteración del suelo con riesgo de erosión, desplazamiento de fauna silvestre y afectación directa a servicios ecosistémicos que benefician a poblaciones humanas cercanas.
"El Manchao no es solo paisaje o turismo. Es una reserva estratégica para el futuro ambiental de Catamarca. Su destrucción nos afecta a todos", advierten ambientalistas locales.
Una reserva clave para el futuro ambiental
La Reserva Natural Municipal El Manchao fue creada en 2025 y abarca una superficie de 39.574 hectáreas. Forma parte del "mosaico de conservación de las Sierras de Ambato", una iniciativa que articula esfuerzos para proteger ecosistemas críticos en el oeste catamarqueño.
Este espacio natural es hábitat de flora y fauna nativas, algunas amenazadas, como también de cuencas hídricas fundamentales que alimentan arroyos y sostienen el suministro de agua para numerosas comunidades. Además, actúa como regulador climático y barrera contra la erosión, al tiempo que captura carbono y ayuda a mitigar los efectos del cambio climático.
En El Manchao se conservan especies de fauna y flora autóctonas en peligro, bsques de algarrobos, jarillas, quimiles y pastos de altura, suelos frágiles que necesitan cobertura vegetal para evitar aludes y cuencas que sostienen el equilibrio hídrico regional, según consignó el sitio Andalgalá al instante.
Llamado urgente a la conciencia
Este incendio no solo representa una catástrofe ambiental, sino también un llamado de atención sobre la fragilidad de estos ecosistemas frente a la acción humana. La recuperación llevará años y requerirá políticas públicas sostenidas, control efectivo del territorio y una mayor conciencia ciudadana.
"Estamos perdiendo años de historia natural y posibilidades de vida futura", señalaron desde organizaciones ecologistas. El Manchao, hoy en peligro, es un símbolo de todo lo que aún se puede y debe preservar.