Si alguna vez cocinaste huevos, panqueques o carnes en una sartén vieja, seguro conoces la frustración de ver cómo todo se queda pegado, arruinando la receta y el estado del utensilio. Pero lo que muchos desconocen es que existe un truco simple, económico y eficaz para recuperar el antiadherente natural de tus sartenes sin necesidad de comprar una nueva.
Ya sea que uses sartenes de teflón, acero inoxidable o hierro, este método casero prolonga su vida útil y mejora la experiencia al cocinar.
Con el tiempo, las sartenes pierden su capa antiadherente por el uso continuo, el sobrecalentamiento, los rayones con utensilios metálicos o la limpieza agresiva. Esto provoca que los alimentos se adhieran a la superficie, se quemen más rápido y sean más difíciles de limpiar.
El truco casero más eficaz: curar la sartén con sal y aceite
Este método es muy usado para revivir sartenes desgastadas. Funciona tanto en superficies de hierro como en algunas de teflón o acero.
¿Qué necesitas?
- 2 cucharadas de sal gruesa
- 1 cucharada de aceite vegetal (girasol o maíz)
- Papel de cocina o una servilleta
- Fuego medio
Paso a paso para curar tu sartén y evitar que se pegue la comida:
- Limpia bien la sartén: asegúrate de que no haya restos de comida ni grasa vieja.
- Calienta la sartén vacía a fuego medio durante 1 o 2 minutos.
- Añade la sal gruesa y muévela con una espátula durante unos segundos. Esto ayuda a eliminar microresiduos y "abrir" los poros del metal.
- Retira la sal y añade el aceite vegetal.
- Esparce el aceite por toda la superficie con ayuda del papel de cocina. Hazlo con cuidado para no quemarte.
- Deja que se caliente a fuego bajo durante 2 o 3 minutos más. El calor sella el aceite y crea una nueva capa protectora.
- Apaga el fuego y deja enfriar completamente antes de limpiar o volver a usar.
Consejo extra: cómo mantener esa antiadherencia
Primero que nada debes evitar lavar con esponjas metálicas ni usar spray antiadherente comercial, ya que puede dejar residuos pegajosos. Secar la sartén después de cada lavado es fundamental, al igual que precalentarla antes de agregar aceite o ingredientes.
Otro truco es que no muevas la comida, apenas la pongas; deja que se selle. Además, puedes usar grasas adecuadas según el tipo de preparación. Por último y no menos importante, nunca uses utensilios metálicos en sartenes de teflón.