La Secretaría de Medio Ambiente concretó con éxito el traslado de un puma rescatado en Catamarca hacia la reserva Parque Pericos, ubicada en la localidad de Colonia Caseros, en la provincia de Entre Ríos. El ejemplar, que fue hallado en malas condiciones físicas durante abril de 2024, completó un prolongado proceso de recuperación sanitaria y adaptación, lo que permitió su reubicación definitiva en un espacio natural especialmente preparado para la conservación de grandes felinos.

El animal, de aproximadamente 22 meses de edad, había sido encontrado en la localidad de Saujil, departamento Pomán, con un marcado deterioro en su condición corporal, lo que encendió las alertas de los organismos de protección ambiental. Tras el rescate, se activó un operativo coordinado entre distintos equipos técnicos y veterinarios para garantizar su atención y recuperación integral.

Luego de ser evaluado por especialistas, el puma recibió atención veterinaria en diferentes etapas y establecimientos. En una primera instancia fue trasladado a la clínica C.I.M.A., en la Capital, donde se le practicaron controles médicos, estudios específicos y tratamientos orientados a estabilizar su estado general de salud. Posteriormente, fue alojado en el Centro de Recepción de Fauna Silvestre de la Secretaría de Medio Ambiente, donde continuó su recuperación bajo estricta supervisión profesional.

Como parte del proceso de rehabilitación, el felino fue luego trasladado a un recinto especialmente ambientado en la localidad de Colonia del Valle. Allí se trabajó en la readaptación del animal, con el objetivo de fortalecer su condición física y favorecer conductas compatibles con su vida en un entorno natural controlado. Gracias a estos cuidados, el puma logró una evolución favorable y sostenida.

El ejemplar fue bautizado "Pando" por el equipo que participó en su recuperación y actualmente se encuentra en excelente estado de salud y óptima condición corporal. Según se informó oficialmente, el traslado definitivo a la reserva Parque Pericos se realizó cumpliendo todos los protocolos de seguridad y bienestar animal, y marca el cierre de una etapa clave en su proceso de conservación.

En su nuevo hogar, Pando contará con amplios espacios para desplazarse, refugios naturales y condiciones ambientales acordes a las necesidades de su especie. La reserva, especializada en la protección de fauna silvestre, ofrece un entorno seguro que garantiza su bienestar a largo plazo, sin posibilidad de contacto indebido con personas.

Desde la Secretaría de Medio Ambiente del Ministerio de Agua y Energía destacaron que este logro fue posible gracias al trabajo articulado entre profesionales, técnicos y organismos especializados. El operativo fue encabezado por el organismo a cargo del ingeniero Eduardo Niederle, quien lideró las acciones orientadas a asegurar la preservación y el bienestar del ejemplar.

Asimismo, desde el área ambiental remarcaron la importancia de tomar conciencia sobre la protección de la fauna silvestre y recordaron que los animales silvestres no son mascotas. En este sentido, advirtieron que el cautiverio, el transporte ilegal, la comercialización y la tenencia de este tipo de especies constituyen un delito penado por la legislación vigente.

El caso de Pando se suma a otras acciones de rescate y conservación impulsadas por la provincia, y pone de relieve la necesidad de fortalecer políticas públicas de protección ambiental, así como la responsabilidad ciudadana frente al cuidado de la biodiversidad. La preservación de especies silvestres, señalaron, es una tarea colectiva que requiere compromiso, información y respeto por la naturaleza.