En el inicio de la problemática en el paraje de El Lindero, cuando se produjo el primer deslave y la aparición de las grietas allá por septiembre, se realizaron estudios para determinar las razones de este preocupante fenómeno. Tres geólogos intervinieron en el lugar y las conclusiones de los mismos, entre ambiguas y poco contundentes, indicaban que todo se debía a un acomodamiento natural del cerro. Por lo tanto, que no había intervenido la mano del hombre para provocar tan impactante cambio en la estructura del cerro.
En las últimas horas, esta teoría fue descartada y surgió como denuncia, el verdadero motivo de lo que generó al impactante movimiento de tierra, que este domingo provocó el alud, En la búsqueda del porqué de estos hechos, siempre estuvieron los vecinos y pobladores de la zona, quienes resultan los directos afectados por todo esto. Y en este sentido fue la familia Maza quien reveló la intervención de personas y hasta un organismo provincial, como quienes generaron el cambio en la estructura de la masa de tierra.
Según lo indicó Jesús Maza, se descubrieron en la zona alta de la montaña unas acequias que se habrían estado usando para el desagote de unas cámaras y filtros de unos piletones de Obras Sanitarias. En un principio la descarga se efectuó correctamente sin afectar el medio ambiente, pero en los últimos años, los caños por los que pasaba el gran flujo de agua se rompieron. Según el relato del vecino, y uno de los afectados por los últimos acontecimientos, todo comenzó cuando en "las Mesadas de Aconquija, se hicieron las cámaras y filtros de la ex Obras Sanitarias, dicho en criollo, los piletones para filtrar y purificar el agua que viene por un largo canal desde el Río Pizavil, y luego es distribuida a la red de agua potable que abastece a gran parte de la comunidad de Aconquija. De hecho, esas cámaras en forma periódica son desarenadas, lavadas y tienen un sobrante permanente de agua. En sus primeros años, y desde su habilitación, tenían un desagote a través de unos caños que bajaban por la ensenada de Don Vedia, y luego por una acequia salía hacia el río El Campo. Por supuesto, que la gente de antes era más guapa y precavida para estas cuestiones, pero con el tiempo, este servicio paso de mano en mano, donde quizá no importaba el servicio, pero si el dinero. Y así paso que esos caños de desagote se rompieron y el agua comenzó a hacer de las suyas".
Es allí donde se comenzó a gestar lo que ahora es un desastre, al punto que cerro, luego del primer alud, está a punto de ceder por completo. Según lo indicado por Maza, que cuenta con el registro fotográfico, "se le hizo más cómodo largar el agua por una acequia hacia la zona de los derrumbes".
Según lo indicado por la familia Maza, en su momento su padre le prohibió al organismo en cuestión que se desagotara el sobrante de agua por allí, porque al hacerlo el agua llegaba hasta el arroyo por los huecos de los "topos de tierra " que existen en gran cantidad por las laderas, y que son parte de la estructura del mismo cerro. Esto no fue escuchado y el agua se siguió largando en gran volumen y esto se mantuvo durante años. "Con el tiempo, comenzaron a aparecen los primeros derrumbes, y subimos a ver la parte alta de la montaña y vemos las grietas. También nos topamos con un importante agujero en la montaña, por donde se perdía toda el agua de esa acequia. Una acequia muy prolija, y limpia bien paliadita, con huellas que había sido usada para el curso del agua y que, en las últimas horas, se dejó de usar, justo antes del alud".
Esto, a juicio de los pobladores, fue advertido por los tres geólogos que fueron a hacer su evaluación técnica a ese sector alta de la montaña y no habría sido mencionado, y menos acusado como causal de lo que estaba sucediendo. "La gran cantidad de barro que produjo este alud, para mi es obra de las vertientes naturales de la zona y en gran parte por el agua del desagote de los piletones y sobrantes que, durante meses o años, lo que fue conducido hasta ese lugar. Esta agua al llegar a las capas arenosas y rocosas filtraba hasta las capas toscas de la arcilla, por la cual generó que se reventará el barro en este alud, que ha producido el aplastamiento y deslizamiento de tierra hacia abajo".
