El fuerte temporal del último lunes, fenómeno climático con características que no se presentaban desde hace más de una década en el Valle Central, provocó graves daños en las calles de la ciudad, que quedaron cubiertas por toneladas de arena, piedras, ramas y barro, entre otros destrozos. La cantidad de agua caída y el breve lapso en que se desataron las intensas precipitaciones, desbordaron las calles y ocasionaron enormes daños, estimados en un costo de 500 millones de pesos. 

Sin embargo, apenas concluyó el temporal, se puso en marcha un gran operativo en el ámbito capitalino, que permitió limpiar integralmente el área urbana en tiempo record. Maquinaria y personal especializado de todas las áreas municipales, ganaron las calles y desarrollaron en pocas horas un plan de limpieza que abarcó desde la zona céntrica hasta el último barrio, con resultados que pudieron apreciarse en cada rincón de la Capital. 

De ahora en más, restan las obras de fondo, para las cuales ya se está trabajando, aunque requerirán más tiempo y, sobre todo, una enorme inversión. Desde la Municipalidad se avanzó en los proyectos más urgentes, al tiempo que se gestiona el financiamiento para poder ejecutar estos trabajos en el menor tiempo posible. Mientras esto ocurre, la respuesta al desastre ocasionado por el temporal, permite que pocos días después ya no queden vestigios de lo ocurrido.