Mantener la ropa con un aroma fresco y agradable después del lavado es un objetivo común en cualquier hogar, incluso en zonas húmedas como algunas regiones de Catamarca. Existen métodos simples y efectivos que permiten mejorar el lavado, prolongar el perfume de las prendas y evitar malos olores.
Medir correctamente los productos
Una práctica frecuente es usar más jabón del necesario, creyendo que esto garantiza un mejor aroma. Sin embargo, especialistas recomiendan respetar siempre las medidas indicadas por cada marca. El exceso de jabón puede dejar residuos en la ropa, generar olores extraños y hacer que las prendas queden pesadas.
Un refuerzo práctico es agregar unas gotas de vinagre en el compartimento del suavizante para neutralizar olores y mejorar la suavidad de las telas.
Retirar la ropa apenas finaliza el lavado
Para evitar el olor a humedad, es clave sacar la ropa del lavarropas inmediatamente después de finalizar el ciclo. También se aconseja no guardar las prendas si aún conservan humedad, ya que esto favorece los malos olores.
Perfumes caseros para la ropa
Una opción económica y fácil de preparar es un aromatizador casero: en un envase con rociador se mezclan dos tapitas de suavizante, una tapa de alcohol y el resto de agua. Antes de usar, se agita bien y se aplica directamente sobre la ropa.
Aromatizar placares y cajones
Para mantener un aroma agradable en el placard, puede utilizarse una bolsita de organza rellena con arroz y algunas gotas de aceite esencial, como lavanda, rosas o menta. Otra alternativa es colocar restos de jabón de tocador en su interior. También sirven discos o bolitas de algodón impregnados con perfume o aromatizante.
Limpieza del lavarropas
El mantenimiento del lavarropas es esencial para evitar que la ropa salga con mal olor. Si el equipo cuenta con la función "limpieza de tambor", se recomienda utilizarla. De lo contrario, puede elegirse un ciclo caliente (60-90°) a 400 rpm colocando vinagre blanco en los compartimentos.
Es importante revisar la goma o fuelle del tambor y retirar restos de suciedad, pelusas o pelos que podrían manchar o generar mal olor en las prendas.