A casi veinte días de una noticia triste y conmovedora, el protagonista de un hecho aberrante, tiene desde este fin de semana una nueva oportunidad, Muchos recordarán a Tilín como el perrito que sufrió zoofilia, aunque para la Justicia local, solo se trató de un hecho de exhibicionismo de parte del agresor del animalito. Más allá de las valoraciones de este juicio, no excento de polémica, la historia del perrito continuó y con cambios, además del abuso. Su familia de origen, impactados talvez por el hecho, decidió no tenerlo más y lo dio en adopción.
Desde ese momento Silvia Barrionuevo, reconocida rescatista, emprendió la campaña para encontrar una familia que le diera otra oportunidad al animalito. Pasaron los días y como las esperanzas no se pierden, finalmente Tilin encontró un hogar que le abrió sus puertas. Así lo confirmó la misma Silvia, en sus redes sociales y la novedad ya tiene impacto. “Muchísimas gracias a Fiama Purulla y a su familia por darle la oportunidad a Tilin de tener un buen hogar”.
El, para demostrar que estaba más que contento con la nueva vida, juego, corrió y movió su colita mostrando que todo vuelve a estar en orden en su vida.
“Él es un perrito muy lindo y muy buenito. Realmente es una pena lo que le ocurrió. El fue víctima de abuso por parte de un depravado quien aparentemente ya venía siguiendo los rastros del perrito. Él hombre fue detenido, pero a las horas lo soltaron”, comenta la rescatista resumiendo lo vivido por el perro.
Más allá de la buena noticia y la alegría de saber que este ser ahora tiene la posibilidad de una mejor calidad de vida, es seguir generando conciencia sobre el maltrato animal. Las leyes poco castigan, y la prueba fue este caso. “La justicia no hará absolutamente nada, como en la mayoría de estos hechos. Es muy triste tener que admitir que estamos tan lejos de lograr que se actúe como corresponde, que investigue. Lo ideal en este caso, es que vean de brindar asistencia psicológica a ese hombre, porque seguramente volverá a comer otro hecho igual”, sentenció Silvia.
Pero lo que vivió Tilín ya fue borrado para él desde el momento que lo cobijaron y su nueva familia le dio el cariño y el cuidado que toda mascota se merece.
