Si estás buscando una receta sencilla, saludable y llena de sabor, esta tarta de zapallitos es perfecta. Con ingredientes accesibles y un proceso amigable, te permitirá disfrutar de una comida liviana y nutritiva en cualquier momento del día.
Antes de arrancar, te contamos todo lo que vas a necesitar para preparar esta tarta de zapallitos:
Ingredientes:
- 1 masa para tarta (tipo criolla)
- 5 zapallitos
- 5 huevos
- 4 cucharadas de queso blanco
- 2 zanahorias
- 2 cucharadas de cebolla deshidratada
- ½ cucharadita de ajo triturado deshidratado
- ½ cucharadita de condimento para vegetales cocidos
- 1 pizca de sal fina
- ½ cucharadita de tomillo seco
La preparación comienza con unos pasos básicos: lavar bien los zapallitos y las zanahorias. Luego, cortá los zapallitos en láminas finitas, sacándoles el cabito, y pelá las zanahorias para cortarlas en rodajitas delgadas. Así, se cocinarán de manera uniforme y rápida.
En una sartén grande, calentá un chorrito de aceite de girasol y salteá las zanahorias durante dos minutos. Después, agregá los zapallitos junto con un toque de cebolla deshidratada y ajo triturado, que aportarán un aroma delicioso. Cociná todo a fuego medio durante unos 15 minutos, revolviendo de vez en cuando, hasta que los vegetales estén tiernos pero sin deshacerse. Recordá que después irán al horno, así que no hace falta que queden completamente cocidos.
Mientras tanto, batí los huevos en un bowl grande hasta que estén bien espumosos. Este paso ayuda a que la tarta quede más aireada y liviana, ¡una clave para que quede perfecta!
Cuando los vegetales estén listos, apagá el fuego y mezclalos con los huevos batidos, el queso blanco, una pizca de sal, condimento para verduras cocidas y un toque de tomillo seco. Mové suavemente con una espátula, envolviendo los ingredientes para que el relleno quede cremoso y aromático.
Precalentá el horno a temperatura fuerte y enmantecá una tartera, forrándola con masa criolla. Pinchala con un tenedor para evitar que se infle durante la cocción. Verté el relleno sobre la masa y llevá al horno.
Primero, cociná unos 10 minutos a temperatura alta para que la base se arme bien. Luego, bajá a temperatura media y dejá otros 15 minutos, o hasta que el centro esté firme. Para asegurarte, podés clavar un palillo: si sale seco, tu tarta está lista para disfrutar.
