Jerry Selbee descubrió que, cada vez que el juego llegaba a su pico más alto de premio, la tendencia era repartirse entre los participantes que tuvieran billetes con los números 5, 4 y 3, de las cifras seleccionadas.

Según observó, esta norma aplicaba solamente si ninguno de los concursantes acertaba los números ganadores. 

De esta manera, la pareja empezó a emplear probabilidades para determinar la tendencia de los números que salían. Así, lograron tener una predicción para adquirir aquellos boletos con números ganadores.

Al enterarse del primer concurso donde la regla se aplicó, compraron el equivalente a 3.600 dólares en boletos y recaudaron 6.300 dólares. 

Luego, Jerry invirtió 8 mil dólares y duplicó el monto ganando. Así se hicieron millonarios y fundaron una empresa que se dedica a la inversión y al diseño de estrategias. 

En total, recaudaron unos 26 millones de dólares a lo largo de los concursos.

Ante tal situación, las autoridades de Estados Unidos iniciaron una investigación al respecto. Pero el juez concluyó que no se había detectado ninguna irregularidad y que la pareja había obtenido todo su dinero de manera legal.