Racing se repuso del tropiezo en la Copa Libertadores en el Cilindro de Avellaneda: venció 2-1 a Estudiantes, con goles de Gonzalo Piovi y Juanfer Quintero. Méndez, de penal, sobre el final, descontó para la visita. Ambos enfrentaban el compromiso con la misión de reponerse al dolor que provocó las eliminaciones de sus incursiones internacionales. La Academia no logró el objetivo al caer por penales en los cuartos de final frente a Boca, con una espina adicional clavada por la Ley del Ex, dado que Chiquito Romero, reconocido hincha del club y nacido futbolísticamente en el Tita Mattiussi se convirtió en el héroe del Xeneize para llevar al elenco de Jorge Almirón a la siguiente instancia. El Pincha, en tanto, se despidió en la fase de los ocho mejores de la Sudamericana, también desde los doce pasos, luego de haber superado al Corinthians en los 90 minutos. Es decir, que en el Presidente Perón había una muestra de carácter para ambos. Y la dio el local.
El conjunto de Fernando Gago hizo los méritos para ponerse en ventaja a través de los destellos de calidad que imponía Juanfer Quintero. El colombiano se destacó en la ofensiva local, junto a Trapito Ojeda, Nicolás Oroz y las proyecciones de Gastón Martirena, pero como sucedió desde que se lesionó Roger Martínez, al equipo le faltaba peso en el área.
Sin Maxi Romero en el equipo, considerado uno de los máximos responsables de la falta de gol contra Boca, el entrenador decidió reemplazar al atacante con pasado en Vélez y PSV por Nicolás Reniero, pero el ex Argentinos y San Lorenzo tampoco estuvo a la altura de las expectativas. La Gagoneta sufría la escasez de un nueve, y en ese contexto el que consiguió celebrar el 1 a 0 fue Gonzalo Piovi.
Una clara infracción de Sebastián Ascacibar sobre Gabriel Rojas obligó a Fernando Espinoza a sancionar la pena máxima. Y desde los doce pasos, el defensor con pasado en Gimnasia demostró su buen pie. Lo llamativo fue que todas las ejecuciones en las que se hizo cargo Piovi desde su arribo a Racing, terminaron en gol, a excepción de la serie ante Boca. Un karma imposible de explicar en Avellaneda.
En el inicio del complemento, el ex River Plate tuvo el premio que se le negó frente al Xeneize. Al ser uno de los mejores atacantes del fútbol argentino, Juanfer Quintero apeló a su talento para extender la diferencia y confirmar que La Gagoneta apuntará todos sus cañones a las dos competiciones domésticas que le quedan.
