En cada país, las celebraciones de Año Nuevo están marcadas por las diferentes costumbres del lugar. Desde platos rotos y lanzar zapatos hasta papas bajo el colchón, estas son las tradiciones más sorprendentes para recibir al 2023.
De igual forma, estas son solo costumbres de cada país y no necesariamente deben ser consideradas como predicciones exactas.
En República Checa, por ejemplo, es costumbre que las mujeres solteras arrojen zapatos sobre su hombro derecho para saber si se casarán el año entrante o no. De acuerdo con la tradición, el calzado debe caer con la punta y mirar hacia la puerta, esto confirmaría que la mujer contraerá matrimonio, de lo contrario, no se casará.
En Dinamarca, el año lo pagan los platos rotos
Otra de las insólitas tradiciones que se realizan en el mundo es la ruidosa costumbre de Dinamarca en la que no solo se tiran y rompen los platos viejos, sino que también se le arrojan a los amigos.
Aunque pareciera que la relación entre una persona que le arroja platos a otra no es la mejor, en el país escandinavo lanzar vajillas o diferentes elementos de cocina a alguien en Nochevieja significa un deseo de buena suerte.
La comida, símbolo de buena suerte
En algunos países como Colombia y Grecia utilizan a la comida como símbolo de buena suerte. Los griegos optan por colgar una cebolla fuera de la puerta como símbolo de fertilidad y crecimiento.
En Colombia sucede algo similar con la papa, legumbre que se coloca bajo el colchón. Se deja bajo la cama tres papas: una pelada, otra sin pelar y con cáscara a medias. A la medianoche, cada uno de los miembros de la familia toma una debajo de su colchón y, de acuerdo con la que elija, proyectará el año que tendrá.
Sudáfrica tiene una tradición un poco similar a lo que sucede en Dinamarca, pero, en vez de arrojar platos y utensilios de cocina, lanzan por la ventana muebles. El fundamento principal de esta tradición es sacar lo viejo para hacer lugar y atraer las cosas nuevas que llegarán con el año que inicia.
Mientras algunos países optan por modalidades un poco más ruidosas y peligrosas para las personas, otros tienen costumbres más sencillas como utilizar ropa interior de un color o evitar comer langostas y cangrejos como sucede en Croacia, ya que estos animales representan un “retroceso” por su particular andar.
