El Papa León XIV renovó este domingo su llamado urgente a la paz en Medio Oriente, en particular tras el ataque del 18 de julio contra la parroquia de la Sagrada Familia en Gaza, que dejó tres muertos. A la salida de la misa que presidió en la Catedral de Albano, mantuvo un breve diálogo con periodistas, en el que insistió en la necesidad de deponer las armas y fomentar el diálogo: "...porque el mundo ya no lo soporta. Hay demasiado conflicto, demasiadas guerras. Tenemos que trabajar de verdad por la paz: rezar con confianza en Dios, sí, pero también actuar".

El Santo Padre se refirió también a la conversación telefónica que mantuvo recientemente con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a raíz del ataque en Gaza. En ese contacto, expresó su profunda preocupación por la escalada de violencia y subrayó "la necesidad de proteger los lugares sagrados de todas las religiones", como gesto mínimo de respeto y convivencia.

En su diálogo con la prensa, León XIV reforzó ese mensaje y llamó a una acción conjunta para frenar la violencia: "Debemos respetar a las personas, trabajar por la paz. Hay demasiado odio, demasiadas guerras".

El Vaticano difundió además un comunicado oficial, en el que se reflejan las palabras del Papa y su "firme llamado al alto el fuego", así como su consternación ante la crítica situación humanitaria en Gaza. En el texto, se advierte que "el precio desgarrador de esta guerra lo están pagando, en especial, los niños, los ancianos y las personas enfermas".