El tres de diciembre del 2022 una o varias personas llamaron a la puerta o bien ingresaron utilizando una llave, ya que las aberturas no estaban violentadas, de la casa de Juan Carlos Rojas, quien se desempeñaba hasta ese momento como ministro de Desarrollo Social de la provincia. Vistiendo sólo ropa interior -según detalla las fotos mostradas por la familia- “Rojitas” abrió la puerta o bien se “levantó” a ver de quién se trataba.

Siempre según las pericias y testimoniales con las que se contaría en el expediente del crimen del ministro que lleva ya seis cuerpos -cada uno de 300 fojas-, el ministro, en circunstancias no del todo claras aún para los investigadores, fue golpeado en la cabeza con un elemento contundente que terminó con su vida, según la conclusión de la segunda autopsia. 

El o los asesinos o sus cómplices “lavaron” la escena limpiando la sangre del suelo y de las paredes. Cuando Fernando fue a darle de comer a sus perros a la casa de su papá lo encontró inmóvil boca abajo en la galería de la casa. Al girar su cuerpo encontró su rostro en un charco de sangre, por lo que lo limpió, observando lo que para él era un golpe en el ojo.

Luego llegó la Policía y el fiscal con el paso de las horas la incertidumbre “de lo que pasó” se instaló y hoy, a horas de cumplirse cinco meses del homicidio, las hipótesis son múltiples, lo que hace presumir que no hay una prueba más fuerte que otra.

Los testimonios y las pruebas obrantes en las casi 2000 fojas que constan en el expediente siguen siendo inconclusas, ya que los resultados de muchas de las pruebas periciales aún “no llegan” y las que “llegaron” no son “concluyentes” para los investigadores.

Este panorama, teñido de encubrimiento para la familia, que denunció ante la justicia esta  posibilidad, lleva a que el fiscal Hugo Costilla, quien asumió la investigación a dos días de ocurrido el homicidio -en principio conjuntamente al fiscal Palacios-, tenga varias hipótesis y a una mujer imputada, quien a pesar del gravísimo hecho por el que estuvo detenida un par de días, goza de la libertad, aparentemente por falta de pruebas “claras”, puesto que en esta etapa de investigación el fiscal solo necesita “sospechas” de la participación y no certeza de la autoría del hecho.

Por todo esto y muchas otras circunstancias, que pese a que la causa no se encuentra bajo secreto de sumario, desde la fiscalía a cargo no se informa oficialmente los hijos de Rojitas, quienes acompañados por amigos y familiares volverán hoy a salir a la calle.

Como muchas familias, quienes comparten el dolor de haber perdido un familiar y no conocer quién o quiénes se llevaron la vida y el motivo, los Rojas buscan en la visibilización de la causa que la justicia actúe con más rapidez y esclarezca el crimen.

La convocatoria es para las 17:30 horas en el paseo de La Alameda, desde donde partirán en silencio y con pancartas hasta el Paseo de la Fe, donde como ya es habitual, Fernando se dirigirá a quienes los acompañaron.

En la oportunidad, la familia Rojas invitó al pedido de justicia a los familiares de Karina Chazarreta -desaparecida desde el 11 de enero - y a las hermanas de Agüero, quien lucha por su vida, tras un grave hecho de inseguridad, junto a otras familias que buscan justicia.