Tras cinco días de intensa búsqueda, este jueves encontraron muerto en el Río Colorado, en la provincia de Río Negro, a un chico de 12 años que se había metido al agua y que, repentinamente, desapareció cuando la corriente lo arrastró.

Todo ocurrió el domingo 27 de noviembre, cuando Tiziano Azcurra y su familia, todos oriundos de la provincia de Mendoza, pasaban la tarde a orillas del río, pero en la provincia de La Pampa. Según se pudo reconstruir, ese día las personas se bañaban en un remanso del río, ya que las aguas estaban tranquilas.

Sin embargo, la calma que reinaba en la zona desapareció cuando Tiziano se arrojó al agua sin saber nadar y la corriente comenzó a arrastrarlo.

“El padre se percató de lo que estaba sucediendo y se tiró al río para rescatarlo, pero se le fue de las manos y vio cómo se lo llevaba la intensa corriente. En esos instantes se comenzaron a escuchar los gritos de pedido de auxilio y ayuda”, informó un testigo al medio local Radio Génesis 25.

Su familia y todas las personas que estaban en el lugar intentaron rescatar al menor mientras llamaban a emergencias, pero nadie pudo sostener al chico.

El personal de la comisaría departamental y los bomberos voluntarios del cuartel 38 iniciaron así la búsqueda del chico junto con vecinos que ofrecieron sus embarcaciones.

Los bomberos de Catriel, en Río Negro, también se sumaron a la búsqueda desde el domingo y realizaron un rastrillaje con embarcaciones y a pie en la zona donde finalmente encontraron el cuerpo.

Antes de la terrible noticia, la mamá de Tiziano mantenía la esperanza de encontrarlo con vida. “Fue un minuto, mi otro hijo tenía barro en el oído, me puse a mirarlo y escuchamos a Tiziano que pedía ayuda. Todos lo empezamos a buscar y no lo pudimos sacar, fue un minuto y no podemos entender cómo pasó. Yo sé que está con vida todavía”, había dicho a medios locales.