El sindicado tiene 58 años, es de profesión docente y ocupa un cargo jerárquico en una de las facultades de la Universidad Nacional de Catamarca. Si bien por el momento, la Justicia no ordenó ninguna medida en contra de su libertad personal, se le notificó de la grave acusación en su contra y se le secuestró, entre otros dispositivos electrónicos, el teléfono celular de uso personal.
Días atrás una mujer de 48 años, cuyos datos personales se reservan, denunció en la Unidad de Violencia Familiar y de Género a su expareja, con quien había terminado recientemente una relación de pareja de varios años.
Según trascendió, en el marco de su tramite de divorcio, la ex se presentó ante los investigadores y denunció a su expareja de, supuestamente, producir imagenes y videos de abuso sexual infantil.
En su relato, la mujer les habría indicado a los investigadores que en una oportunidad -días antes de su ruptura sentimental- encontrándose a solas con su acusado, éste le enseñó un video en el que claramente pudo advertir que una persona menor de edad estaba siendo abusada sexualmente por un adulto, situación que le reclamó, pero que, según expresó, “era normal para su expareja”.
Tras terminar con la relación de pareja, de la que tienen hijos adolescentes en común, la mujer se percató que el denunciado había colocado, supuestamente sin que ella lo supiera, una cámara de seguridad tipo “domo” al lado de la luminaria en el antebaño de la vivienda familiar.
Esta situación llamó la atención de la denunciante, quien sintió temor porque tiene hijos adolescentes y porque a su domicilio suelen concurrir con frecuencia los amigos y amigas de sus hijos. Al momento de presentar la denuncia, la mujer hizo entrega de algunos elementos que podrían tener relación con la causa que se investiga.
Investigación
Al mismo tiempo, la fiscal Valeria Reyes ordenó que, previo a una “vigilancia” del denunciado -quien frecuentaba varios domicilios en la Capital y la Villa de El Rodeo-, personal de la Unidad Judicial N°4 y de la División de Ciberdelitos se hicieran presentes en el domicilio de la zona alta, donde pernoctaba junto a su primera esposa, y se le secuestraran todos los artefactos de almacenamiento electrónico, tanto de uso personal como de uso compartido.
Del lugar, los investigadores secuestraron el teléfono celular del docente, una tarjeta de memoria de 128 GB, dos tarjetas SIM, dos pendrives, una tarjeta de memoria de 64 GB, un disco externo y una notebook.
Según informaron las fuentes de la investigación, en los próximos días el fiscal Reyes ordenará que todos los elementos secuestrados sean remitidos al laboratorio satelital de Valle Viejo para su visualización.
