El fiscal Hugo Costilla, quien tiene a su cargo la investigación del homicidio del exministro de Desarrollo Social de la provincia, Juan Carlos Rojas, y el supuesto encubrimiento del crimen, llevó a cabo una nueva inspección en la casa del funcionario asesinado.

Voceros de causa, consultados por LA UNIÓN indicaron que la medida realizada por el fiscal consistió en “probar” todas las llaves que, entre los días seis y ocho de diciembre de 2022, fueron secuestradas por los investigadores, tanto de la casa del exministro, como de la oficina que ocupaba Rojas en el gremio de Uthgra y en el Ministerio de Desarrollo Social. Además de las llaves secuestradas a los hijos del exfuncionario, a Silvina Nieva -única imputada en la causa- y a otras personas del círculo íntimo de la víctima, quienes podrían tener llave del inmueble.

Según trascendió, la medida obedecía a “reducir” el círculo de personas que podrían haber tenido acceso, por contar con una llave al domicilio de Rojas. Esto en razón de que ninguna de las aberturas del inmueble estaba forzada, por lo que quien o quienes ingresaron a la casa de Rojas el sábado 3 de diciembre y lo asesinaron, lo hicieron “utilizando la llave”.

De la fotografía que fue difundida por la familia del cuerpo de Rojitas se puede advertir que él se encuentra en ropa interior; detalle para nada menor que refuerza la hipótesis de que la o las personas que lo asesinaron eran personas de confianza de la víctima, razón está por la que el exministro o le abrió la puerta o al escuchar que le abrieron la puerta se levantó a ver de quién se trataba, encontrándose en ropa interior porque tenía la confianza suficiente con esa o esas personas. Si bien la medida busca, sumada a otras pruebas documentales y testimoniales, reforzar o descartar hipótesis, esta fue cuestionada por la familia del exfuncionario, para quienes “es solo una pérdida de tiempo. Recién cuatro meses después van a investigar las llaves, nos parece una burla”, expresaron.