El deceso de la criatura ocurrió ayer a la mañana en el distrito de San José, departamento Santa María. El fiscal Contreras ordenó la realización de la autopsia en el cuerpito del niño, la que se practicará hoy a las 8.00 de la mañana en la morgue judicial. La abuela del niño está arrestada y su padre continúa prófugo.

A las 9.30 aproximadamente de la mañana los médicos de guardia del Hospital de San José llamaron a la policía tras el ingreso de un pequeño de un año y siete meses sin vida.

El niño, de apellido Álvarez, había sido llevado por su madre, una joven de 26 años, quien les dijo que momentos antes la abuela paterna de su hijo la había llamado porque el pequeño no reaccionaba. Al llegar a la casa de la mujer de apellido Gutiérrez, la joven madre encontró en la cama a su hijo quien no respiraba, de todas formas lo tomó en sus brazos y lo llevó al hospital.

Al ser examinado los profesionales concluyeron que el niño al momento del arribo al hospital tenía al menos tres horas de fallecido.

Como la criatura estaba al cuidado de Gutiérrez todas las sospechas recayeron en ella, sobre todo porque no se habría percatado -según sus dichos- que el niño estaba fallecido casi desde el mismo horario en el que su hijo, padre del niño de apellido Ocampos había dejado la casa, supuestamente para ir a trabajar. Circunstancias que acrecentaron las sospechas cuando al ir a buscar al hombre no lo encontraron ni en su lugar de trabajo ni en los lugares que solía frecuentar.

El fiscal Carlos Contreras ordenó que la abuela del niño fuera arrestada y que se resguardara la casa en donde estaba el niño para ser inspeccionada por el personal de criminalística y de homicidio que viajaron desde esta ciudad Capital.
Hasta el cierre de esta nota, el padre del niño continuaba desaparecido y la abuela arrestada.