La pastora de la Iglesia Evangélica Espíritu santo, ubicada en las calles Santa Dorotea y Santa Cecilia, denunció el sábado a la tarde un ilícito.
La mujer le relató a los efectivos de la Comisaría Octava que personas desconocidas habían ingresado al predio de la iglesia sorteando una tapia, y que estas forcejearon las rejas y candados de las puertas para ingresar al salón, de donde sustrajeron un bajo, un amplificador, líneas y distintos cables. 
Luego de que los efectivos corroboraron el ilícito denunciado por la pastora, convocaron al personal de la Unidad Judicial N° 8, quienes labraron las actuaciones correspondientes.
Al entrevistarse con los investigadores, la pastora de la iglesia evangélica les dijo que el robo pudo haber ocurrido entre las 23:30 del jueves 21 de marzo y las 13:50 del sábado.