Un joven de 23 años permanecía hasta anoche internado en el centro de salud donde había ingresado en las primeras horas de la mañana con una grave lesión en el rostro por la que podría en principio perder la visión de uno de sus ojos. 

Fuentes policiales consultadas por LA UNIÓN informaron que, aproximadamente a las 5.30 de la mañana, en circunstancias que el móvil realizaba recorridos por Avenida San Juan Bautista intersección de calle Francia en el norte de la ciudad, el conductor de una moto CG 150cc., les hizo detener la marcha para que asistieran a su amigo, quien iba en la moto como acompañante y que tenía el rostro ensangrentado.

Rápidamente, los efectivos trasladaron al herido, quien fue identificado como Uriel Ávila (20) al Caps Edgardo Acuña de Avenida Choya y Avenida Maipú Norte, donde fue asistido por el personal de guardia, quienes al brindarle los primeros auxilio lo derivaron de urgencia al Hospital San Juan Bautista, donde quedó internado en terapia intermedia.

Según se supo, el joven que acompañaba a la víctima, Gabriel Maximiliano Mancini, (23) les contó a los policías que había estado hasta momentos antes con su amigo Ávila, en su vivienda en el barrio Portal del Norte. En ese momento, en la casa de al lado un grupo de mujeres estaban protagonizando un desorden, cuando en un determinado momento una piedra impactó en el rostro de su amigo quien usa lentes. Aparentemente, producto del impacto uno de los vidrios se rompió, lesionando el ojo derecho de Ávila y que comenzó a sangrar por lo que de inmediato lo subió en la motocicleta y salió a buscar ayuda.

Luego de escuchar al testigo, la policía informó de lo sucedido al personal de la Unidad Judicial N° 8 quienes más tarde se hicieron presentes en el lugar del hecho y labraron las actuaciones correspondientes bajo las directivas de la fiscalía en turno.

En cuanto al estado de salud de Ávila, voceros de la causa informaron que el joven ingresó poco después de las 06.00 de la mañana a emergencias de hospital presentando un trauma ocular. Luego de recibir la atención médica, se le practicaron diversos estudios pre quirúrgicos ya que debían operarlo de urgencia. Según trascendió por la lesión sufrida al incrustarse el vidrio del anteojo en el ojo, la víctima podría perder la visión del ojo quedando internado en la sala de cuidados intermedio.