El Gobierno nacional espera que la inflación de diciembre se mantenga por encima del 2%, pero apuesta a una desaceleración en enero, cuando se conozca el primer dato completo de 2026. En el Ejecutivo manejan como escenario base que el primer mes del próximo año muestre una leve baja respecto de noviembre y diciembre, y que "pueda quedar cerca de quebrar el 2%".
Se trata de una expectativa interna que, por el momento, no se traduce en una meta explícita, pero que forma parte de las proyecciones que circulan en los despachos oficiales de Balcarce 50. El último dato del INDEC indicó que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró un aumento del 2,5% en noviembre y acumuló una variación interanual del 31,4%.
En la Casa Rosada interpretan que el registro de noviembre confirma que el proceso de desinflación se volvió más gradual durante el segundo semestre del año. En ese marco, ponen el foco en factores estacionales, como la mayor demanda de pesos en diciembre, y apuntan a romper el piso del 2% antes del inicio del segundo trimestre de 2026.
En paralelo, el Banco Central anunció modificaciones en el esquema cambiario que comenzarán a regir en enero. A partir de entonces, el piso y el techo de la banda de flotación del dólar se ajustarán mensualmente según el último dato de inflación publicado por el INDEC, con un rezago de dos meses. Desde el Gobierno señalaron que la medida busca administrar la volatilidad cambiaria sin desarmar el ancla monetaria ni generar un traslado a precios.
El nuevo marco monetario se complementa con un programa de acumulación de reservas que prevé compras por hasta US$10.000 millones durante 2026, bajo un escenario base de re-monetización de la economía. Desde el Banco Central aclararon que ese monto podría ampliarse hasta US$17.000 millones si la demanda de dinero crece por encima de lo previsto.
Las proyecciones oficiales incluidas en el Presupuesto 2026 contemplan una inflación interanual del 10,1% para diciembre del año próximo y un tipo de cambio oficial cercano a los $1423. En el Ministerio de Economía subrayan que esos números funcionan como un "escenario de referencia" y no como un compromiso explícito de corto plazo.
El presidente Javier Milei volvió a sostener públicamente que la inflación "va a arrancar en cero" entre junio y agosto de 2026. "La política monetaria tiene un rezago. Nosotros creíamos que era de entre 18 y 24 meses, pero hay una tesis doctoral que probó que los rezagos son de 26 meses. Esto quiere decir que para la mitad del año que viene o agosto, la inflación seguro va a empezar con cero", afirmó en distintas entrevistas.
En este contexto, el Gobierno también busca reforzar el ancla fiscal mediante decretos mensuales que reasignan partidas tras la caída del capítulo once del Presupuesto, que incluía la derogación de las leyes de Emergencia en Discapacidad y de Financiamiento Universitario. Entre las prioridades de corto plazo figuran además el proyecto para promover el uso de dólares no declarados, la reforma laboral, un recorte de al menos el 10% del empleo estatal y la profundización del plan de privatizaciones, medidas cuyo impacto es seguido de cerca por las provincias, incluida Catamarca.