El jefe del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, prometió este domingo "abolir la prostitución en España", argumentando que ese comercio sexual "esclaviza a las mujeres".

Tras la presentación por parte del ministerio de Igualdad del proyecto de ley conocido como Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual, se puso en la agenda el debate sobre si es necesario o no abolir la prostitución, una actividad que en España es alegal, es decir, no está prohibida, pero tampoco regulada como actividad económica. 

La inclusión de “tercería locativa” es una figura que permitiría castigar con penas de prisión a los propietarios de los locales que lucran con la prostitución. 

OTRAS, el sindicato de trabajadoras sexuales que nació en 2018 en España, fue declarado en primer momento como nulo por la Audiencia Nacional, considerando que la prostitución no es un trabajo que sus condiciones laborales no pueden regularse. 

Pero, en junio de 2021, una sentencia del Tribunal Supremo corrigió este fallo y reconoció el derecho de las prostitutas que ejercen por cuenta propia a formar una agrupación. 

Desde el punto de vista de entidades como OTRAS, es necesario diferenciar entre prostitución voluntaria y la trata, entendiendo que la alegalidad es una situación ambigua.