En la Casa Rosada, el clima previo a las elecciones bonaerenses se vive con máxima tensión. Este jueves, Karina Milei recibió en su despacho a Santiago Caputo y Sebastián Pareja en la última reunión de la mesa política chica libertaria antes de la votación. El encuentro, que pretendía ser una tregua estratégica, volvió a evidenciar las fracturas irreversibles dentro del oficialismo.
Caputo y Pareja mantienen un vínculo quebrado desde el cierre de listas, cuando las Fuerzas del Cielo quedaron relegadas. La discusión giró en torno al operativo de fiscalización: La Libertad Avanza necesita 45 mil fiscales para controlar la elección en la provincia, pero Pareja acusó a Caputo de no colaborar. El estratega respondió que, al no tener candidatos propios, no le correspondía.
La jornada empeoró por la noche, cuando el Senado rechazó por amplia mayoría el veto presidencial a la ley de Emergencia en Discapacidad. En medio del debate, un tuit del influencer libertario "El Gordo Dan" contra el senador oficialista Luis Juez generó un fuerte revuelo. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, salió al aire en TN para repudiar el ataque y reclamó disciplina en la militancia digital. Horas más tarde, Caputo sorprendió con un mensaje desde una cuenta oficial: publicó un decálogo para convocar a sumarse a las "Fuerzas del Cielo", sin mencionar al Presidente.
El episodio dejó expuesto un escenario de descontrol interno. Incluso dentro del gabinete se multiplican las advertencias hacia Javier Milei: "Vos sos el líder, tenés que liderar", le dijo uno de sus ministros. El mandatario, desde Estados Unidos, eligió el silencio.
Escándalos judiciales y paranoia de inteligencia
En paralelo, el Gobierno buscó frenar la difusión de audios filtrados de Karina Milei en el marco del caso ANDIS. Lo hizo a través del juez Alejandro Maraniello, cuestionado por denuncias de acoso y por aspirar a cargos clave en el fuero federal. La maniobra no solo no detuvo la polémica, sino que abrió un nuevo frente en el Consejo de la Magistratura.
Los rumores sobre espionaje interno se multiplican. Funcionarios recuerdan la caída del exjefe de Gabinete Nicolás Posse por el uso discrecional de información sensible. La ministra Sandra Pettovello y el abogado cercano a Milei, Santiago Spagnuolo, también figuran entre los apuntados en investigaciones sobre filtraciones y manejos irregulares.
El domingo, la prueba electoral
Con este telón de fondo, La Libertad Avanza llega a los comicios bonaerenses atrapado en su interna y con dudas sobre la capacidad de fiscalización. En el conurbano temen que la baja participación los perjudique, mientras en el interior confían en un voto más favorable. La mitad de los bonaerenses rechazó ser autoridad de mesa, lo que suma incertidumbre al operativo.
Las encuestas no logran marcar una tendencia clara y en el oficialismo predomina la cautela. "Todo se definirá por la participación y el arrastre de los candidatos locales", reconocen en despachos oficiales.
El rol de Kicillof
El gobernador Axel Kicillof, en tanto, espera el resultado con la mira puesta en su futuro político. Si logra adjudicarse un triunfo, podría dar un paso hacia la consolidación de su proyecto presidencial y marcar distancia del kirchnerismo duro. Incluso algunos especulan con un acercamiento a los gobernadores peronistas de centro, fortalecidos tras el triunfo de Gustavo Valdés en Corrientes.
En este escenario caótico, un operador político sintetizó la paradoja: "Caputo quiere que gane Kicillof y Máximo K quiere que gane Milei". El domingo despejará parte de las incógnitas, pero no todas: el verdadero test para Milei y su gobierno llegará recién en octubre.