En la tarde del día de ayer sábado, en las oficinas de la Secretaría de Turismo de la comuna de Andalgalá, se cortó el dulce de membrillo más grande del mundo. Del acto emotivo acto fueron parte el Intendente Eduardo Córdoba, el Secretario de Turismo, Guillermo Acevedo, dulceras, público en general, entre otras autoridades de la comuna.
El momento, que fue calificado como “histórico”, por el jefe comunal, viene a cerrar un proceso iniciado allá por febrero de este año, cuando se gestó la iniciativa de hacer este dulce y proponerlo como un récord mundial. La pieza de 314 kg, es fruto del esfuerzo de los dulceras y productores del departamento.
El Intendente luego indicó que el simbólico momento del corte del dulce vino a coronar “un fin de semana histórico” para Andalgalá. Seguidamente agradeció a las “queridas dulceras y queridos dulceros por mostrar la esencia, las tradiciones y la invaluable cultura fuerteña. Nuestro nombre recorre el mundo y la voz cacana de Andalgalá, resuena en cada rincón por este hito que muestra que el nuestro es un territorio en el que se conjugan las expresiones de belleza de nuestra gente, la inmensidad y pureza de nuestra naturaleza”.
Los turistas y vecinos fueron parte de este momento, mientras que previamente participaron de la "Feria Santa", que se desarrolló en el paseo principal de los andalgalenses. Luego entre estos turistas y andalgalenses pudieron apreciar, probar, degustar y ser parte del histórico corte del dulce de membrillo más grande del mundo.
Luego del corte, la Municipalidad de Andalgalá, realizó un reconocimiento muy especial a todas las artesanas y artesanos que participaron de este récord mundial.
El récord
El hecho sin precedentes que vino a culminar este fin de semana, se inició el febrero pasado cuando artesanas y artesanos dulceros congregados en la plaza de la localidad de Chaquiago elaboraron el dulce de membrillo más grande del mundo. La Municipalidad de Andalgalá con el apoyo técnico de la Agencia del INTA en Andalgalá, organizó el evento con el objetivo de batir el récord mundial Guinness del dulce más grande, que se encontraba en poder de Puente Genil en España cuyo dulce pesaba 125 kilos.
En la elaboración trabajaron más de 20 dulceras y dulceros artesanales locales con pailas y fuego de leña.
