Cuando se terminan las ideas en la cocina, recurrir a las recetas clásicas es siempre un acierto. La berenjena a la parmesana, tradicional de Italia, es un plato que conquistó paladares en todo el mundo por su sabor único, su practicidad y su valor nutritivo.
En Catamarca, donde la producción de hortalizas como la berenjena tiene presencia en huertas familiares y ferias locales, esta receta encuentra un terreno fértil para formar parte del menú cotidiano. Con productos frescos que se consiguen fácilmente en los mercados de la provincia, preparar este plato en casa es accesible y delicioso.
La berenjena, rica en antioxidantes y fibra, se combina con salsa de tomate, quesos fundidos y hierbas frescas para dar vida a un gratinado dorado que puede acompañar cualquier almuerzo familiar o una cena especial.
Ingredientes
2 berenjenas grandes (preferentemente frescas y locales)
200 g de salsa de tomate
100 g de queso parmesano rallado
300 g de queso mozzarella fresco
1 huevo
25 ml de aceite de oliva
10 ml de leche
Sal, pimienta y albahaca fresca al gusto
Sal gruesa
Paso a paso
Preparación: Lavar las berenjenas y cortarlas en rodajas de 1 cm. Espolvorear con sal gruesa y dejar reposar 10 minutos para quitar el amargor. Enjuagar bien y secar.
Horneado: Precalentar el horno a 180 °C y dorar las rodajas en una placa.
Armado: En una fuente para horno, colocar una capa de salsa de tomate, berenjenas, parmesano, mozzarella y albahaca. Repetir hasta completar.
Gratinado: Batir huevo, leche y queso rallado, volcar sobre la preparación y hornear 20 minutos, hasta que la superficie esté gratinada.
El resultado es un plato económico, sabroso y adaptable a los productos de Catamarca, ideal para compartir en familia o con amigos, sin necesidad de ingredientes sofisticados.