A una semana de lo que se pensaba iba a ser el cierre definitivo del bar ubicado en calle Sarmiento, la situación se sigue prolongando y en el medio siguen estando los trabajadores. Mientras, la intervención del gremio gastronómico no pudo evitar el avance de las instancias legales, que ahora pone al Bar Caravati a las puertas de un desalojo. Esta situación es la que genera preocupación en la entidad gremial por cuanto, a juicio de José Vega, secretario general de Uthgra, el cruce de cartas documentos entre Esteban Cano y el Club Social 25 de Agosto, deja a los empleados en indefensión.  

“Nosotros siempre vamos a estar del lado del trabajador y por eso estamos en constante contacto con ellos. Ahora esperamos lo que se defina a nivel legal, para nosotros poder activar las medidas necesarias para los empleados”, apuntó el gremialista en diálogo con La Unión. 

Denuncia de acoso 

Vega indicó que el gremio acompañará a las trabajadoras que denunciaron las situaciones de acoso por parte de alguno de los socios del Club Social, aclarando que estas ya están individualizadas. “Nuestros abogados están analizando la estrategia sobre este tema, siempre y cuando las empleadas así lo deseen y quieran seguir adelante con esta denuncia”, manifestó el secretario general. 

Recordemos, que, según el relato de una de las mozas, lo que se vivía cuando debían llevar servicio al interior de esta institución, lo que se vivía “era desagradable”. Al describir sentenció que era como “estar en una cancha de fútbol”. Dicho esto, agregó luego: “Arriba se amontonan, porque son muchísimos hombres. Y es ahí cuando te silban, te miran, te dicen cosas y hasta te hacen ir y volver. Vos te sentís incómoda, porque es como pasar de la elegancia del bar a una cancha de fútbol. Es horrible”.