Con la llegada del verano y las altas temperaturas, la búsqueda de estrategias para refrescarnos y sobrellevar el calor se convierte en una prioridad. Una opción poco convencional pero respaldada por estudios y tradiciones culinarias es el consumo de ají como una herramienta natural para enfrentar el calor extremo.

El ají, conocido por su componente activo, la capsaicina, posee propiedades termogénicas que pueden generar una sensación de calor en el cuerpo. Aunque parezca contradictorio, el consumo de ají en realidad puede estimular la transpiración y, en consecuencia, ayudar al cuerpo a regular su temperatura interna en climas cálidos.

El picante: un buen aliado para el calor

Investigaciones sugieren que la ingesta de alimentos picantes, como el ají, puede activar la termogénesis, un proceso metabólico que aumenta la producción de calor corporal y la sudoración, lo que podría llevar a una sensación de enfriamiento y confort en condiciones de calor extremo.

Además, se cree que el consumo moderado de ají puede estimular la liberación de endorfinas, sustancias químicas relacionadas con la sensación de bienestar, lo que podría contribuir a mejorar el estado de ánimo durante los días calurosos.

Ají para el calor: siempre con moderación

Aunque el ají puede ser beneficioso para combatir el calor, es crucial tener en cuenta que su consumo debe ser moderado, especialmente para aquellas personas que tienen sensibilidad gástrica o problemas estomacales.

Si se decide incorporar el ají a la dieta durante el verano, se recomienda hacerlo gradualmente y en cantidades tolerables para el propio cuerpo. Puede añadirse a ensaladas, salsas, aderezos o platos ligeros para darle un toque de sabor y potencialmente ayudar a lidiar con el calor.

La menta: otra opción para combatir el verano

Para quienes no son afines al picante, la menta ofrece una sensación refrescante debido a su contenido de mentol, que activa receptores de frío en la piel y produce una sensación de frescura.

La menta puede acoplarse fácilmente a las comidas y bebidas para refrescar el paladar y combatir el calor. Desde infusiones hasta ensaladas con hojas frescas, su versatilidad permite su inclusión en una amplia gama de platos y bebidas veraniegas.