Sin subsidios ni alivios de por medio, son los usuarios del transporte público de la provincia los que reciben el impacto esta semana de la medida interpuesta por las empresas de transporte. Y como si fuera poco, mientras rige aún la reducción de las frecuencias, se confirmó el aumento del boleto urbano. Las novedades no fueron bien recibidas. “Todo está mal”, indicaron los catamarqueños en el relevamiento realizado por La Unión.
El pensamiento de Fernanda es el de muchos, en relación a la modalidad impuesta sobre las frecuencias: “La verdad que nos choca. Nos complica en el trabajo y en todo lo que hacemos, pero la verdad, que es más de lo mismo porque ya de por sí tenemos que esperar más de una hora, la mayoría de las veces”. La sensación de estar a la deriva es compartida por todos y a esto se suma la de desprotección, cuando se suma a este panorama lo relacionado al incremento del pasaje. Allí es cuando Ramona sumó parecer mientras aguardaba en la parada por más de una hora y media su colectivo, marcando: “Llevar el precio del boleto a $90 es una locura, sobre todo en una provincia como esta, donde no tenemos ningún tipo de comodidad en los colectivos, porque la verdad es que nos llevan amontonados”.
En la recorrida por las paradas de colectivos, no hubo buenos comentarios sobre el servicio y las novedades de las últimas horas, poco colaboraron con la consideración sobre las empresas de transporte y las autoridades del área. El calificativo más usado fue: “un desastre”. Este mismo lo usó Verónica, quien se mostró molesta y decepcionada con la confirmación de la suba del boleto. “Encima que no nos aumenta los sueldos, ahora nos aumentan esto”. La madre de familia deslizó que este incremento va a impactar obviamente en su economía, como en la de todos los trabajadores, sumándole a eso la espera del colectivo, que como indicó: “con o sin reducción de frecuencia, siempre es una tortura”.
“Nos complican bastante”, señaló Mónica, al expresarse sobre la merma de las frecuencias. Seguidamente lanzó su pedido, que es es el de muchos: “Traten de solucionar esto y piensen en los que tenemos el colectivo como única movilidad. No nos pueden hacer esto. Piensen en la gente mayor que tiene que pasar más de una hora esperando. Pónganse en lugar de nosotros”.
