Momentos dramáticos se vivieron anoche en Sierra Brava, en el departamento Fray Mamerto Esquiú, cuando una joven madre con un avanzado embarazo fue violentamente desalojada de su vivienda. El hecho causó tanta conmoción, que los vecinos intervinieron `para tratar de mediar en la tensa situación.
La circunstancia llegó al grado de tumulto cuando la dueña de la vivienda amenazó con hacer explotar una garrafa, lo que generó aún más agitación de parte de quienes asistían a este panorama.
Todo se originó cuando una joven madre de tres niños y quien además está a punto de dar a luz, fue corrida de una casa que habitaba en el Bº 40 viviendas. Según los dichos de Erika Medina, ella fue objeto de amenazas por parte de la dueña de la casa y puntualizó “tengo la voluntad de dejar la casa, pero en el estado que estoy no puedo quedar en la calle con mis hijos y una persona con discapacidad”. En medio de la noche, la mujer no tenía dónde ir.
La solidaridad de los vecinos fue fundamental para que el hecho no pasara a mayores. Ellos se mostraron indignados por el proceder de la dueña de la casa.
Ayuda del municipio
Tras el dramático hecho, intervino la Guardia Urbana de la Municipalidad de Fray Mamerto Esquiú y la Secretaría de Producción y Desarrollo. Y ante el desamparo en el que quedó esta familia, se determinó que el grupo fuera trasladado a la Casa de la Mujer que tiene la comuna.
Allí se encuentra en este momento Erika, sus hijos y esposo y según confirmó a Diario La Unión, Patricia Centurión, encargada del lugar permanecerán allí durante quince días, hasta que ellos puedan acceder al alquiler de una nueva vivienda. En el lugar, señalaron desde la comuna, que todos están siendo contenidos y ya fueron asistidos por asistentes sociales. Mientras permanezcan allí, no tendrán que abonar nada y tendrán todo lo referido a la alimentación, medicamentos y ropa.
En el caso que pasadas las dos semanas y ellos no consigan un nuevo hogar, Centurión adelantó que ellos podrán renovar el plazo de albergue. La funcionaria además dijo que la joven, y ante el cuadro acuciante que vivió anoche, fue chequeda por personal médico y aseguró que el embarazo no corrió riesgo y que ella y el bebé están en buenas condiciones.
