Este sábado 24 de junio, la ciudad Capital celebró la Solemnidad del Nacimiento de su Patrono San Juan Bautista, con la Eucaristía, procesión, fogata y chocolatada.
Los actos litúrgicos se llevaron a cabo en la Catedral Basílica y Santuario del Santísimo Sacramento y de Nuestra Señora del Valle, con la Santa Misa, presidida por el padre Ramón Carabajal, capellán de la Catedral Basílica y Santuario mariano, y concelebrada por los padres Gustavo Flores y Luis Páez, rector y capellán respectivamente.
En su homilía, el padre Carabajal dijo que “celebrar el nacimiento de Juan, el Bautista, nos ayuda a poder mirar nuestro propio nacimiento del espíritu, desde Dios” y recordó “el encuentro entre Isabel y María, ambas estaban embarazadas”, sobre el cual “los textos bíblicos nos dicen que el niño salta de alegría cuando escucha el saludo. Y eso es lo que produce el encuentro con Jesús, nos hace saltar de alegría, de gozo”. Por eso, “que este encuentro con Dios reavive nuestra esperanza, nuestro gozo, y nos lleve a querer anunciarlo”.
Más adelante señaló que la misión de San Juan Bautista era “preparar al pueblo para Jesús; que nosotros también podamos preparar el corazón de los demás para Jesús, haciendo la voluntad de Dios. Y la única forma de hacer la voluntad de Dios es estar llenos del Espíritu”.
“Que San Juan Bautista nos ayude a tomar conciencia de que somos profetas, que estamos llamados a preparar el corazón de los demás. Le pidamos esta gracias a Dios por intercesión de este santo”, expresó.
Luego de la Comunión, los fieles se dispusieron a participar de la procesión con las imágenes de San Juan Bautista y del Sagrado Corazón de Jesús a quien celebramos de manera especial durante todo este mes.
Entre cantos y oraciones, los fieles realizaron este caminar como Iglesia sinodal alrededor de la plaza 25 de Mayo hasta el Paseo de la Fe, donde se encendió la fogata, y luego de la bendición final se sirvió un chocolate caliente preparado por grupos de servidores del Santuario.
