Las cucarachas son insectos que adoran el calor, la humedad, la oscuridad y los lugares con restos de comida, motivo por el que suelen anidar siempre en la cocina. Existen muchos trucos caseros para ahuyentarlas, aunque uno de los más efectivos y menos conocidos consiste en poner un frasco con vaselina y frutas en la alacena.
Mucha gente les escapa a los insecticidas químicos y a los servicios de desinfección, ya sea por proteger su propia salud o la de las mascotas que viven en el hogar. Hoy, la mayoría opta por remedios caseros para espantar a las plagas de la casa.
Entre los trucos más populares resaltan el uso de bicarbonato de sodio con azúcar, vinagre blanco, hojas de laurel y hasta de cáscaras de cítricos. La vaselina con frutas, al igual que estos elementos, brinda una solución ecológica a un problema que puede volverse grave si no se toman cartas en el asunto rápidamente.
Cómo espantar cucarachas con un frasco que tenga vaselina y frutas
La alacena, al ser un lugar oscuro, húmedo y donde quedan restos de comida, es uno de los espacios en los que se debe redoblar los esfuerzos para ahuyentar a las cucarachas. Los especialistas en control de plagas aconsejan poner ahí un frasco con vaselina y frutas.
Este truco casero es efectivo porque combina atracción más imposibilidad de escape, un principio simple que funciona muy bien con estos insectos.
La fruta, por su elevada concentración de azúcares naturales, funciona como cebo. Una banana, una manzana madura o alguna cáscara liberan olores que las atraen fuertemente, sobre todo durante la noche.
La vaselina, por su parte, es la encargada de crear una barrera resbalosa. Al untar esta sustancia en la cara interna de un frasco de vidrio, las cucarachas pueden entrar, pero no salir. La superficie se torna muy resbaladiza e inestable, por lo que se ven imposibilitadas de trepar hacia el orificio de salida. Una vez que ingresaron quedan totalmente contenidas, lo cual reduce su circulación por la cocina o la alacena sin utilizar insecticidas.
Se trata de una alternativa útil para hogares con niños o animales, que por error podrían ingerir o tocar los insecticidas químicos, con consecuencias potencialmente graves para su salud. No obstante, es importante considerar que la mezcla de vaselina y frutas no elimina los nidos ni los huevos, sino que simplemente sirve para reducir su presencia y confirmar si hay cucarachas. En infestaciones más graves es recomendable acudir a otros métodos.
Otros trucos caseros muy efectivos contra las cucarachas
Además de las trampas más conocidas, existen otros trucos caseros muy efectivos para espantar a las cucarachas, basados en aromas intensos y sustancias que interfieren en su comportamiento.
Uno de los más utilizados es el laurel, cuyas hojas secas desprenden un olor desagradable para estos insectos. Colocarlas trituradas en alacenas, cajones y detrás de la heladera ayuda a reducir su presencia. Algo similar ocurre con las cáscaras de limón o naranja, que funcionan como repelente natural gracias a sus aceites esenciales.
Un método frecuente combina bicarbonato de sodio con azúcar. El azúcar actúa como atrayente y el bicarbonato altera su sistema digestivo, lo que provoca una reducción progresiva de la población.
También se destaca el uso de ácido bórico, una sustancia de acción lenta que deshidrata a las cucarachas al contacto. Su eficacia es alta, aunque requiere especial cuidado en hogares con niños o mascotas, ya que debe colocarse en grietas y rincones inaccesibles.
Por último, la limpieza con vinagre blanco cumple un rol clave. Si bien no las elimina, su fuerte olor desorienta a las cucarachas y borra los rastros químicos que utilizan para desplazarse.
Combinados con una correcta higiene, el sellado de grietas y el control de la humedad, estos trucos caseros permiten mantenerlas alejadas sin recurrir a productos químicos agresivos.