A una semana de iniciada la crisis por el reclamo salarial de los cirujanos y la presentación de sus renuncias a los cargos de jefatura, este miércoles hizo lo propio el director general del Hospital “San Juan Bautista”, CPN Miguel Mosquera Gutiérrez, lo que vino a generar más presión a un sistema público muy resentido. 

La decisión de aceptar o no la nueva dimisión está en las manos del ministro de Salud, Lucas Zampieri, y según indicaron fuentes oficiales a La Unión, esta no fue aceptada aún. De hecho, se estaría analizando la continuidad, definición que se conocerá en las próximas horas y que, de concretarse, significaría un gran respaldo al directivo y una postura marcada sobre lo hecho por los siete cirujanos. 

De ser así, Mosquera resistiría y se mantendrá en su cargo, luego de haber pasado por cargos directivos en el nosocomio capitalino, en anteriores gestiones de Salud, primeros con Claudia Palladino y luego con Manuela Ávila. 

A pesar de esto, la polémica en sí no deja de existir y más voces se suman y agregan tensión a esta realidad. Este jueves, otra vez se manifestó APROSCA, apuntando contra el gobierno provincial por la crisis en la salud pública. La entidad gremial, manteniendo su discurso refirió que “la Salud Pública agoniza por mala política del Gobernador Jalil y todos sus funcionarios funcionales”. 

Luego, sobre la discusión eterna de las guardias y la disparidad salarial, la entidad gremial sentenció que la realidad que salió a la luz hace una semana se originó con “jefes que tramaron acuerdos corruptos volando las leyes y derechos de los trabajadores como equipo de salud. Esto fue anticipado por APROSCA y FESPROSA y ahora llega a los pacientes”.