Las ojeras son una de las preocupaciones estéticas más frecuentes y pueden estar vinculadas al cansancio, el estrés o la deshidratación. Entre los métodos caseros más difundidos para mejorar su apariencia se encuentra el uso de cubos de hielo, una alternativa sencilla que aprovecha los efectos del frío sobre la piel del rostro.

El contacto del hielo con la zona ocular produce la contracción de los vasos sanguíneos dilatados, lo que contribuye a reducir la hinchazón y a atenuar el color oscuro característico de las ojeras. Se trata de un efecto temporal, pero efectivo como solución rápida.

Para aplicar este truco de belleza, se recomienda envolver el cubo de hielo en un paño suave y realizar toques delicados sobre la zona durante un período breve, de entre dos y tres minutos, evitando el contacto directo con la piel para prevenir irritaciones.

Cómo eliminar las ojeras usando cubos de hielo

El procedimiento puede potenciarse utilizando cubos de té verde o aloe vera, siempre con la piel previamente limpia. Los pasos recomendados son los siguientes:

• Limpieza del rostro: antes de comenzar, es fundamental que la piel esté limpia.
• Preparación del hielo: envolver un cubo en una gasa fina, pañuelo o toalla delgada.
• Aplicación: realizar movimientos suaves o masajes circulares sobre las ojeras y párpados.
• Tiempo: no exceder los 2 a 3 minutos por zona para evitar irritaciones.
• Finalización: enjuagar con agua tibia si se usaron ingredientes adicionales y aplicar el contorno de ojos habitual.
• Este procedimiento puede repetirse una o dos veces al día, según la necesidad de cada persona.

Consejos para prevenir la aparición de ojeras

Además de los tratamientos caseros, los especialistas recomiendan adoptar hábitos saludables para prevenir su aparición:

• Dormir entre 7 y 9 horas diarias.
• Mantener una correcta hidratación.
• Usar protección solar y gafas con filtro UV.
• Reducir el consumo de sal, azúcar, alcohol y tabaco.
• Incorporar alimentos ricos en hierro y vitaminas C y K.
• Manejar el estrés y evitar frotarse los ojos.

En climas calurosos como el de Catamarca, estos cuidados cobran mayor importancia, ya que las altas temperaturas pueden favorecer la deshidratación y el cansancio facial.