Las pizzetas sin TACC son una deliciosa alternativa para aquellos que siguen una dieta libre de gluten. La preparación de estas pequeñas delicias es similar a la de una pizza tradicional, pero utilizando ingredientes que no contienen trigo, cebada, centeno ni avena. La base de la pizzeta puede hacerse con una variedad de premezclas sin TACC disponibles en el mercado, o incluso con ingredientes naturales como garbanzos, lentejas o papas.
Las pizzetas ofrecen la flexibilidad de ser personalizadas con una amplia gama de ingredientes, desde una simple salsa de tomate y queso hasta opciones más gourmet con verduras asadas, carnes especiadas o quesos artesanales. Preparar pizzetas en casa puede ser una actividad divertida y creativa, permitiendo a cada uno experimentar con sabores y texturas hasta encontrar su combinación perfecta. Además, muchas recetas pueden ser adaptadas para ser preparadas en sartén o incluso en el horno, lo que las hace accesibles para todo tipo de cocinas y habilidades culinarias.
El término "sin TACC" es una designación importante que indica que los productos alimenticios están libres de trigo, avena, cebada y centeno, todas fuentes de gluten. Esta etiqueta es crucial para las personas con enfermedad celíaca, una condición en la que la ingestión de gluten conduce a daños en el intestino delgado, lo que afecta la absorción de nutrientes. Llevar un estilo de vida libre de gluten es actualmente el único tratamiento efectivo para manejar la enfermedad celíaca, haciendo que la identificación de productos "sin TACC" sea una parte vital de las elecciones dietéticas diarias para los afectados.
Ingredientes:
- 300 g de premezcla
- 1 sobre de levadura seca
- 1 huevo
- 2 cdas de aceite
- 250 cc. de agua
- Sal al gusto
Preparación:
Para comenzar con esta receta de pizzetas vas a colocar todos los ingredientes en un recipiente y mezclá con la licuadora. Vas a obtener una preparación de consistencia semilíquida, como la de una torta.
Luego, tomá una placa para horno, en ella vas a colocar moldes individuales o si te animás, dale forma a las pizzetas sin el uso de estos moldes. No te olvides de pincelarlas con aceite.
Dejá levar y luego las mandás a un horno precalentado hasta que se doren. Sin lugar a dudas, es una receta simple, que no tiene mayores complicaciones, y sobre todo que te permite stockearte con una comida que te sacará de apuros. Podés mantenerlas en el freezer por algunas semanas, recordá que, con un poco de salsa de tomates, queso y algunos ingredientes, podés hacer magia en tu cocina.
