Los bocaditos de espinaca se consolidan como una de las recetas más prácticas y saludables para sumar al almuerzo o la cena. En Catamarca, donde la primavera invita a renovar hábitos y comidas más livianas, esta opción se destaca por su versatilidad y valor nutritivo.
Ideales para disfrutar en una picada, como guarnición o como plato principal, los bocaditos de espinaca se diferencian por no llevar harina y cocinarse al horno, sin necesidad de frituras. Por eso, resultan una alternativa perfecta para quienes buscan cuidar su alimentación y mantener una dieta equilibrada sin resignar sabor.
A diferencia de las versiones tradicionales —que suelen incluir harina refinada o freírse en aceite—, esta receta es más liviana, pero conserva lo mejor: una textura dorada y crocante por fuera, con un interior tierno y sabroso. Su sencillez y valor nutricional la convierten en una excelente alternativa para sumar vegetales de forma creativa y deliciosa.
Receta: bocaditos de espinaca sin fritura ni harina
Ingredientes:
500 g de acelga fresca o 300 g de espinaca congelada
2 huevos
1 cebolla
2 cucharadas de queso rallado
3 cucharadas de avena fina
Sal y pimienta, a gusto
Nuez moscada (opcional)
Preparación paso a paso:
Lavar las hojas de espinaca o acelga, escurrirlas y cocinar en sartén hasta que reduzcan su volumen. Escurrir nuevamente y picar finamente.
En una sartén con unas gotas de aceite de oliva, cocinar la cebolla hasta que quede transparente y dejar enfriar.
En un bowl, mezclar la espinaca o acelga con la cebolla, los huevos, el queso rallado y la avena. Condimentar con sal, pimienta y nuez moscada.
Con las manos húmedas, formar bolitas y colocarlas en una placa para horno con papel manteca o levemente aceitada.
Cocinar en horno precalentado a 180 °C durante 20 minutos, girando a mitad de cocción para que se doren de manera pareja.
El resultado son bocaditos livianos, nutritivos y llenos de sabor, ideales para disfrutar tanto fríos como calientes, en casa o al aire libre durante los días templados de Catamarca.
